martes, 13 de febrero de 2018






En las 2 primeras imágenes, las que vemos arriba del texto, nos encontramos la entrada al Pabellón Antonio Díaz Miguel de Alcázar de San Juan. En este pueblo se empeñan en poner dificultades a gente para hacer deporte, ya que, en ambos trimestres muestro dos complejos deportivos. El anterior pecaba de excesivas escaleras, y este que vemos, de una excesiva rampa, la cual, cuesta subir y bajar a cualquiera persona aunque no tenga impedimentos físicos. Hay otras dos entradas o accesos al interior, una para acceder al gimnasio que esta debajo de la pista multiusos, y otra posterior "de emergencia". Para llegar a la pista en si, por cualquiera de las dos, volvemos a tener otra inclinación de las mimas dimensiones, y encima de un pavimento deslizante. 

Y en las 2 últimas imágenes, las que vemos debajo del texto, nos encontramos la calle Jesús Romero del barrio de Santa María, de Alcázar de San Juan. El barrio más céntrico del pueblo, y esta calle en si que es la posterior del ayuntamiento. Este barrio en general, es famoso por su laberinto de calles, carreteras y aceras estrechas. Pero en este caso, le sumamos el plus del andamio de esta casa, que es esquina y entra en ambas calles. Podemos ver que la obra queda justa en la acera dejando un hueco inexistente para pasar. En conclusión, si ya de por sí es de una gran dificultad transitar por estas calles no teniendo ninguna discapacidad, con este tipo de obras, estamos obligados a cruzar la acera o directamente a circular por la también estrecha carretera.  


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