domingo, 1 de marzo de 2015

Barreras arquitectónicas para dar y regalar.

Encontrándonos en la localidad de La Solana nos centraremos en dos barreras arquitectónicas que os muestro y explico a continuación con dos fotos:


En la primera de ellas aparecen unas escaleras, las cuales dificultan a cualquier persona en silla de ruedas subir y llegar a la lonja, que es la parte de arriba de éstas. Sinceramente, creo que está de más que para poder llegar hasta ahí tengan que dar la vuelta entera hasta llegar a la Plaza Mayor que está detrás. También, justo en el centro de dichas escaleras vemos una barandilla que podría ayudar a las personas con muletas o a las personas mayores a subir o a bajar, pero se hace difícil igualmente por la pendiente en la que se encuentran.


En la segunda y última foto aparece una puerta que es la entrada a la Iglesia de Santa Catalina, la cual se encuentra justo detrás de las escaleras de la foto anterior. El problema de esta puerta es que tiene un bordillo, el cual impide que una persona en silla de ruedas pueda pasar por sí sola, obviamente necesitaría la ayuda de otra para poder entrar.

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